Tras la asunción de Andrés Balkenende como presidente de la Federación de Jockey Clubes la entidad se propuso crear un mecanismo para oficializar las carreras que se disputan en el interior del país y generar una mejor sinergia con los hipódromos centrales.

Con ese fin una delegación de la entidad viajó la semana pasada a Uruguay para interiorizarse del funcionamiento del Sistema Integrado Nacional de Turf (SINT), que funciona allí desde hace varios años y establece equivalencias entre Maroñas y el resto de los hipódromos del país con el objetivo de lograr equidad en la competencia.

Representando a la Federación estuvieron Gastón Ramos Mejía y Reinaldo Molina, quienes fueron recibidos por con Horacio Ramos, gerente de Maroñas; Marcelo Storace, jefe de Carreras; Rita Rocca, jefa de desarrollo del servicio Veterinario; Aparicio Martínez, director Gral. de Casinos; Pablo Núñez, Comisión Hípica Maroñas y Las Piedras; Marcelo Lussich, integrante del Comisariato de Maroñas y Las Piedras; Roberto Camarotte, jefe de operaciones del Servicio Veterinario; Adrián Estades, presidente del Stud Book uruguayo; Antonio Turturiello, presidente de la Comisión Hípica de Las Piedras y Maroñas; Alfredo Acuña, coordinador Gral. del SINT; y  Pablo Máspoli presidente del Comisariato de Maroñas y Las Piedras.

El SINT funciona sobre la base de establecer “categorías” por cantidad de carreras ganadas según el hipódromo. El sistema se conoce como “4-2-1”, siendo el hipódromo de referencia Maroñas y el segundo Las Piedras. De esta forma, un ganador de cuatro competencias en cualquiera de los otros hipódromos o en forma combinada es rankeado como ganador de dos en Las Piedras y de uno en Maroñas. Por lógica, un ganador de dos en Las Piedras participa como ganador de una en Maroñas. Y luego se establecen distintas combinaciones.

Para volcar la propuesta al resto de los hipódromos del interior, la Federación realizará un Congreso especial el sábado 20 de agosto en San Francisco, previo a la gran jornada del domingo 21 que se correrá en el Hipódromo Oscar C. Boero de la ciudad.

Un punto también a ordenar es la confección de los calendarios para que no se superpongan jornadas importantes, dado que durante ese fin de semana también se correrá en La Punta una reunión de relieve que complica la difusión.

Es intención de los dirigentes explicar con claridad el funcionamiento de este sistema para sumar voluntades e intentar alcanzar la integración. Para eso son conscientes que es necesario el apoyo de los hipódromos centrales, o de al menos uno de ellos. En principio, la iniciativa podría ser presentada al Hipódromo de San Isidro, al que también le propondrán que se convierta en el Laboratorio que realice los controles antidoping de esas carreras. “Sin San Isidro, esto no es posible”, subrayó en forma contundente Ramón Mejía durante una entrevista con el tradicional programa de turf que conduce nuestro colega “Danisaby”.

El dirigente cordobés apunta todos los cañones a la jornada del 20 de agosto: “Tenemos que explicarlo e ir consiguiendo adhesiones. Es un proceso que tenemos que iniciarlo con los hipódromos que estén de acuerdo y si resulta bien, seguramente se irán sumando cada vez más”.

Pero no todo es tan color de rosa. En esta misma edición publicamos una columna de Luis Monti, reconocido periodista e integrante de la conducción del Hipódromo de Tucumán, que expone un punto de vista diferente y crítico de este tipo de equivalencias. Monti realiza una descripción acabada a partir de su profundo conocimiento de lo que sucede en el interior y en los hipódromos centrales que bien vale la pena leer con atención porque sin dudas aporta enorme valor al debate.

No obstante, pese a las disidencias, bien vale que al menos se ponga una propuesta arriba de la mesa y comiencen las discusiones. En definitiva es el diálogo en pos de un desarrollo para todos y sustentable que durante mucho tiempo hemos reclamado.