Ese objetivo se hizo realidad ayer cuando Carabajal obtuvo su triunfo número 614 al ganar junto a Veggie Joy el premio Helium en el Hipódromo de Palermo.

Hace unos meses, en el marco del mes de la mujer, Revista Palermo entrevistó a Lucrecia Carabajal, y nos habló sobre su presente como entrenadora y su vida como madre. La pasión por su trabajo y el desafío de entrenar a los caballos fueron el eje de la charla. Sin embargo, remarcó que su rol de madre es lo más importante en su vida y que se esfuerza por equilibrar ambas responsabilidades de la mejor manera posible.

Fue en ese punto que Lucre reveló que le había hecho una promesa a su hija Nina de sacarse una foto después de una victoria arriba de un caballo. Como su patente sigue vigente, aunque como a todos los profesionales con patente de jockey y cuidador, solo se le permite correr a sus entrenados, solo fue cuestión de hacer lo que sabe de memoria: trabajar duro para cumplir su nueva meta. 

El sábado 10 de diciembre, ambas lo recordarán como el día del sueño cumplido. Su triunfo número 614 junto a Veggie Joy fue contundente. Carabajal le sacó 4 cuerpos de ventaja al escolta. Después de la carrera, madre e hija finalmente concretaron el objetivo, se sacaron su merecida foto en el círculo de vencedores.

“La victoria me volvió a agrandar el corazón de alegría como en los viejos tiempos”, comentó exultante Lucre, y destacó que, más allá del número de victorias, lo importante es "vivir el día a día y tratar de ser feliz junto a Nina haciendo lo que me gusta".

Desde Revista Palermo, felicitamos a Lucrecia por su victoria y le deseamos lo mejor para el futuro.