Ganaron la desinformación y el desconcierto esta tarde en Palermo, el escenario que tras la disputa de la 6ª carrera, de un programa de 14 pruebas, debió anunciar la suspensión de la reunión y la reprogramación de los cotejos que no pudieron correrse, incluido el Clásico Coronel Miguel F. Martínez (G3), nada menos que el que inicia el camino de los potrillos al Gran Premio Nacional (G1), el Derby argentino.

Disputada la última carrera de la fecha, la sexta, empezaron los rumores. Sin una comunicación oficial, en el hipódromo ganó cuerpo la versión de que el atraso de la reunión se debía a un problema técnico relacionado con la empresa Claro, y que debido a eso no se podía apostar ni tampoco seguir la transmisión por streaming. 

Lo que siguió después es que el tiempo pasó y el supuesto problema no se solucionó. En el medio, se filtró con fuerza que la verdadera razón de la interrupción del programa habrían sido los despidos de 40 empleados de APHARA. 

Como producto de la desinformación ni ésta ni la versión original fueron confirmadas oficialmente. En el medio, los actores de la actividad seguían esperando en el hipódromo sin saber si el programa continuaría o no.  

A las 19 la noche cayó en el escenario metropolitano y todo seguía siendo desconcierto. Siempre extraoficialmente, se dijo que el Clásico Martínez se iba a correr sin apuestas. De hecho, los caballos salieron a la redonda. Pero ahí, un grupo de entrenadores inscriptos en las otras carreras, que también defendían su derecho a correr, se opusieron y tras una discusión amistosa con Jorge Mayansky Neer, Juan Franco Saldivia y Gustavo Scarpello, quienes intentaron explicar la importancia de correr el clásico, finalmente los caballos no pudieron salir a la cancha y el cotejo central no se corrió.

Tras este escenario, a las autoridades de Palermo no les quedó más alternativa que oficializar la suspensión de la reunión y la reprogramación de las 8 competencias que no se corrieron para el próximo viernes.

La sensación que quedó en la gran mayoría es que todos terminaron siendo rehenes de una situación que las autoridades no supieron manejar a tiempo y que, para colmo de males, intentaron disfrazar con un problema técnico.

Fotos y videos Constanza Pulgar