La prueba central del miércoles en el hipódromo de San Isidro fue el Clásico Telescópico, competencia que citó a ejemplares de 4 años y más edad, en recorrido de 1.200 metros sobre la arena, en la que el representante de la caballeriza La Providencia puso su chapa en la cima del marcador para cristalizar el éxito de jerarquía que venía reclamando desde hace rato.

De buen concepto antes de su estreno, al zaino de más de 550 kilos que tuvo participación en el proceso selectivo de la temporada pasada, logró potenciar su imagen desde que lo recortaron a distancias para velocistas, demostrándolo en esta ocasión con la cosecha, al momento, del triunfo más importante de su campaña.

La prueba central del miércoles en el hipódromo de San Isidro fue el Clásico Telescópico, competencia que citó a ejemplares de 4 años y más edad, en recorrido de 1.200 metros sobre la arena, en la que el representante de la caballeriza La Providencia puso su chapa en la cima del marcador para cristalizar el éxito de jerarquía que venía reclamando desde hace rato.

De buen concepto antes de su estreno, al zaino de más de 550 kilos que tuvo participación en el proceso selectivo de la temporada pasada, logró potenciar su imagen desde que lo recortaron a distancias para velocistas, demostrándolo en esta ocasión con la cosecha, al momento, del triunfo más importante de su campaña.

Siempre en el fuego de la carrera, el conducido por Luis Vai se trenzó en fuerte pugna por el centro con Emberinado, ejemplar que le puso la vara alta, pues, tras casi 10 meses sin competir reprisó de manera óptima para perder por poco con el pensionista de Pedro Nickel Filho, que dejó crono de 1’11”64c. Fue tan reñida la disputa, que del 1º al último hubo menos de 2 cuerpos de diferencia.

Fue la 4ª conquista en 12 intentos para el Global Hunter, registrando muy buena efectividad en las 12 cuadras, puesto que, en 3 incursiones sobre los 6 furlongs, ha obtenido par de triunfos y una presea de bronce. ¡Bien!