"Es una noticia que en verdad no esperaba, pero el jueves y tras una junta médica que evaluó mi lesión se determinó que tengo rotura del nervio óptico del ojo izquierdo y que con esta lesión no puedo seguir ejerciendo mi profesión", le adelantó la noticia a REVISTA PALERMO el jinete argentino brasileño nacido en Bernardo de Irigoyen.

Domingos sufrió la lesión el 1º de mayo y conduciendo a Goteo Key en el Gran Premio Montevideo (G1), ejemplar que rodó al entrar a la recta y le produjo un fuerte golpe en la cabeza que ocasionó la lesión en cuestión.

Pero el jockey volvió a correr tiempo después e incluso a ganar, pero luego debió parar nuevamente debido a que comenzó a percibir que no veía bien del ojo izquierdo. Tras someterse a varios estudios le indicaron reposo durante varios meses, por lo que aprovechó para viajar a Brasil para visitar a sus familiares.

A su regreso volvió a someterse a estudios con los especialistas, hasta que al comprobar la rotura del nervio óptico los especialistas le indicaron que lo mejor sería el retiro.

Aún tratando de asimilar la noticia, Altair Domingos aún no decidió cómo va a seguir su vida fuera de las pistas: "Por el momento no tengo nada pensado", aseguró el profesional que tantos éxitos como jockey cosechó en las pistas argentinas, que se ganó el corazón de los aficionados y al que sin dudas se va a extrañar.