La salida de la pandemia reseteó la actividad y la reanudación fue con la misma esencia, pero con matices que no en todos los casos nos han favorecido, sino todo lo contrario.

Sin embargo, continuamos buscando la mejor forma para vincularnos con todos los actores de la actividad, sin perder de vista a nuestros lectores como principales destinatarios de nuestros esfuerzos.

Fue un nuevo año en el que todos y cada uno de nuestros anunciantes volvieron a confiar en nosotros como canal de llegada a sus clientes, valorando la inversión que se ha realizado en distintas áreas de la editorial cuyo objetivo es no dejar ninguna herramienta tecnológica disponible sin explotar.

Al mismo tiempo hemos iniciado un trabajo conjunto con los hipódromos para avanzar en renovadas ofertas de acceso a la información que potencie la sinergia con quienes montan el espectáculo y nosotros.

En ese sentido destacamos le éxito de la acción realizada en el Hipódromo de San Isidro en ocasión del Gran Premio Carlos Pellegrini, con beneficios para todas las partes incluyendo los aficionados.

Al mismo tiempo, estamos adaptando nuestros sistemas para inmediatamente que estén dadas las condiciones legales formar parte de las plataformas de juego on line que incluyan en su menú las apuestas hípicas.

Sabemos que en este proceso de cambio hemos cometido errores y somos conscientes de algunos perjuicios (involuntarios) para con nuestros “lectores” o “suscriptores web”. Sepan que recibimos y valoramos todos los comentarios recibidos y que aquellos que puedan llevarse a la práctica serán implementados en el menor tiempo posible. Decepcionarlos no es una opción para nosotros.

En muchas ocasiones los cambios traen una velocidad superior a la capacidad de captarlos, asimilarlos, procesarlos y ejecutarlos. Y en nuestra actividad con una carrera cada media hora todos los días y trabajos matinales desde el alba no hay mucho margen para el análisis y la reflexión. La dinámica diaria es abrumadora.

De todas formas, continuamos en el camino. Confiamos que quienes tengan que tomar decisiones trascendentes sobre el futuro de la actividad contemplen que la industria de la información merece una atención especial para el tiempo que viene.

A nuestros lectores, de todos los perfiles, sólo nos queda agradecer un año más por tamaña fidelidad, sólo explicada por un feeling que no está escrito en ningún manual empresario y por eso muchos no llegan a entenderla.

Muy feliz 2022