El
Director de Hipódromos pidió “colaboración” a los profesionales y se refirió al
tema del sistema que tiene paralizado el circo sureño.
El
Director de Hipódromos de la Lotería de la provincia de Buenos Aires, Cristián
Segal, afirmó que los jockeys que compiten en el Hipódromo de La Plata tienen a
disposición las comisiones que les corresponden y enfatizó que “nunca les
dejamos de pagar”, aunque reconoció demoras por tener que realizar los procesos en forma manual por la caída del sistema informático.
De esta forma, Segal salió al cruce de la decisión de los jockeys de no correr ayer jueves 20 por "falta de pago" que derivó en una nueva suspensión en el circo platense.
El
funcionario pidió “colaboración” a los profesionales para “levantar al
Hipódromo de La Plata” de la desastrosa situación en la que se encuentra luego
de varios años de desinversión.
A esta altura es prácticamente imposible salvar la reunión del próximo martes 25 y se mantiene la incertidumbre sobre el jueves 27, como así también el futuro de las siguientes jornadas ante la imposibilidad de efectuar las inscripciones.
“Nosotros
no estamos en contra de nadie. Queremos trabajar para sacar adelante el
hipódromo y necesitamos de la ayuda de todos”, insistió Segal, quien reconoció los problemas que afectan al Bosque.
En
diálogo con REVISTA PALERMO, Segal afirmó que “nunca le dejamos de pagar pero sí sufrimos demoras porque ante la falta del sistema tomamos la decisión de
hacer todo manualmente para no dejar a nadie sin cobrar”.
“Antes
–agregó- cada uno demoraba en la ventanilla 10 minutos y a lo mejor ahora tarde
20 minutos porque todo se hace a mano, pero siempre estuvo el dinero para pagar,
incluso el correspondiente al martes pasado (18 de enero)”, reiteró.
Segal
remarcó que “ayer jueves la Tesorería estuvo abierta hasta las 19 y adelantó
que el lunes próximo también estará abierta para seguir pagando”.
Jockeys
consultados por REVISTA PALERMO –que por obvias razones no quisieron dar su
nombre- afirmaron que “hubo esperas de 40 minutos para cobrar apenas una monta
perdida” y apuntaron a la “mala predisposición” de los responsables de la
Tesorería del Hipódromo.
“Cuando
no es que falta la plata, te lo traban de la administración y si no tenés que
luchar con los de la Tesorería”, describieron los jinetes sobre la situación que
viven a diario.
“Muchos
de los reclamos de los jockeys son justos y hemos tenido colaboración en muchas
ocasiones”, reconoció Segal pero “últimamente se pusieron más belicosos”,
lanzó.
“Nos
dijeron que no tenían la obra social vigente y les presentamos la documentación
del Hospital Español de que está al día. También nos decían que no tenían
seguro y les mostramos que a través de Provincia Seguros tienen la cobertura”,
señaló el funcionario a modo de observación sobre reclamos que a su entender no estaban
argumentados.
Acerca de la estructura edilicia del escenario platense, Segal
aseguró que ya se está en marcha la licitación para la remodelación total del
cuarto de jockeys, al tiempo que afirmó que “ahora la pista está impecable
porque tenemos tres camiones regadores trabajando a full”.
El
director provincial se quejó de la actitud de los jockeys de no correr el
jueves pasado “porque se perjudica toda la actividad y eso no favorece a
nadie”.
Sobre
esta situación reiteró que se mantiene la postura de sancionar a un grupo de
jockeys por no haber cumplido con los compromisos de monta firmados.
Acerca de la caída del sistema informático que mantiene paralizado al hipódromo, Segal
conjeturó: “parece que estamos siendo víctimas de una extorsión”.
“Recibimos
una factura de una empresa a la cuál nosotros no podemos pagarle porque habría
un conflicto de intereses y no sería legal. Nos venía facturando una firma y
ahora apareció una factura a nombre de otra compañía y si le pagamos cometemos
un delito”, reveló.
Según
trascendidos indican que la "nueva empresa" estaría integrada por ex funcionarios provinciales.
No
obstante, se mostró confiado en que la situación se solucionará durante el fin
de semana o a más tardar el próximo lunes y podrá retomarse la actividad de manera normal.