Actualidad
En el país inexplicable, el espectáculo increíble
Del Editor
03/05/2023
Revista Palermo

Y sí, las carreras de caballos se apartaron de la Argentina real por diez horas, en el hipódromo de Palermo. Salieron de un país inexplicable para cobijarse en una jornada increíble. Para que miles pasaran una tarde a pura sensación y, de paso y como si hiciera falta, mostrar su potencia con lo mejor que compite en sus pistas.

Del país cuya dirigencia prefiere la rosca para mendigar divisas en lugar de abrir las fronteras y vender lo mucho que se produce, salen caballos que ganan en medio mundo y sus yeguas madre son codiciadas, por caso, en otro país increíble –pero en la dirección opuesta- como Japón, que en su economía de locomotora arrastra un turf trepidante y cría en un territorio impensado por su extensión. Los hijos que nacieron de esos vientres argentinos triunfan en aquella hípica, que muestra que puede imponerse también en Europa, Arabia Saudita y Dubai, y es una sensación en la Breeders’ Cup, de los Estados Unidos.

Hace unos días, por mencionar sólo un caso puntual, volvieron a ser noticia nuestros sangre pura en Sudáfrica, gracias a Puerto Manzano, un hijo de Seek Again que obtuvo su segundo clásico de Grupo 1 en el césped de Turffontein, sobre 2200 metros. Desde ese medio, las buenas noticias llegaban seguido en la década de 1980 porque el mercado latía en especial con las exportaciones que armaba el intermediario Alejandro Lilienfeld. Puerto Manzano fue criado en el haras de origen chileno Carampangue, que dirige, en San Antonio de Areco, Ignacio Pavlovsky, otro directivo que, como agente de exportaciones, observa trabas en esa actividad.       

El oasis que significó la reunión del República Argentina, con sus Miriñaque, Belleza de Arteaga, Subsanador, Joy Rosy, Rammel y la notable yegua uruguaya Girona Fever tuvo el marco que merecía en un día agradable, que celebraron los incondicionales gracias a los pozos extra por 200 millones de pesos, y la gente de asistencia esporádica –o iniciática-, familiar, que incluyó la posibilidad de ser testigos de una largada a metros de la gatera.

Lo de Girona Fever fue una apoteosis para las decenas de fanáticos que cruzaron el charco y gritaron “¡U-ru-guay!” desde que cruzó el disco del Ciudad de Buenos Aires (G 1). Esa también fue una prueba de que el prestigio de las carreras argentinas es respetado en la región: a los propietarios del stud Uruimporta no les importó invertir 11.000 dólares en el traslado para una carrera que los recompensó con apenas 10.000 -expresado en blue-y además tenían que ganarla-, a lo que hay que sumarle otros gastos de logística. Engrosar la enorme foja de conquistas de la hija de Texas Fever, con el Gran Premio Ciudad de Buenos Aires (G 1), al cabo su 15° éxito, significaba mucho más que un puñado de dólares.

Aunque suene contradictorio, dio gusto volver a ver largas colas frente a las ventanillas de venta-pago, una situación que no fue tan bien vista por el público que, a cada paso, dejaba oír sus quejas en los patios del Paddock y en el segundo piso, porque las gateras se abrían antes de que pudieran apostar. Se sabe que Aphara, el sindicato de empleados por reunión, limita el número de operadores que provienen del hipódromo de La Plata, en un intercambio que sí es fluido entre San Isidro y Palermo.

Todos -y todo- fueron satélites de una estrella, Miriñaque, que encandila hace cuatro años y no da señales de extinguirse. Francisco Leandro Gonçalves, con su triplete de Grupo 1 -incluido el República-, y el dron que hizo tomas fantásticas de los desarrollos, fueron sólo dos de los puntos altos que rodearon al campeón, para fortuna de todos los que lo ovacionaron el lunes y ahora quieran volver a admirarlo en una pista.   

+Notas
20/11/2024
En su estreno en la arena de San Isidro, el zaino de Unión Apeadero (AZ) se impuso de un tirón en el Clásico Telescopico. 
20/11/2024
Así lo decidió el entorno del crédito de Est. Mariana Eva y ganador del Derby, que pasará por alto el Pellegrini.
19/11/2024
El de Hs. Don Julián logró su victoria más relevante al ganar el Clásico Ciudad de La Plata (G2).