Guiada con mucha confianza por Luciano Cabrera (el piloto de Lincoln ganó el jueves la carrera principal con Moriarty y el viernes dio doblete con Yumara Chica y Tawa Nov), jinete con el que la hija de Greenspring compartió cuatro salidas victoriosas, la alazana asumió el liderazgo desde el vamos y se vino derecho hasta el disco.

Por más que Diosa Pampeana descontó terreno en el final, Misty Spring llegó al disco a salvo de sopresas y con 2 cuerpos de diferencia sobre su rival, empleando 55''55c. para el kilómetro.

Notable demostración de Misty Spring, sobre todo de evolución, ya que se trata de una yegua que antes de su desembarco en los cotejos de jerarquía animaba pruebas en la Alternativa. Ahora se afirma en cada victoria clásica la sprinter y seguramente y en lo sucesivo regrese a las pruebas graduales.