El promisorio potrillo dominó con comodidad a su competencia.
El Clásico Guillermo Kemmis (G3), confrontó a machos de dos años en
recorrido de 1.000 metros, donde apareció en escena nuevamente la relevante
figura de Weiba, ejemplar que captó la atención de la afición al salir de
perdedor por 18 cuerpos, y que acudió a esta cita jerárquica con amplia
confianza del público, respondiendo sin titubear a su favoritismo para cosechar
un nuevo éxito.
El descendiente de Portal Del Alto, se movilizó en el fuego desde temprano,
luchando por la posición de vanguardia desde el vamos, despidiéndose de sus
adversarios sin inconvenientes en el tramo de la definición, para dirigirse al
espejo con consistencia hasta sacar 4 cuerpos sobre su escolta. ¡Es muy bueno!
Con la conducción de Francisco Goncalves y el entrenamiento de Mauro Linares,
el nieto de Mr. Light paró el cronógrafo palermitano en 55”43c, y ratificó su
extraordinario perfil de utilidad, quedando preparado una vez más para asumir
con éxito su siguiente aparición. ¡Lo esperamos de vuelta!