El de Tramo 20 unió los extremos para imponerse con total comodidad.
La prueba central de la jornada palermitana fue el Clásico El Virtuoso (L),
contienda que confrontó a machos de 4 años y más edad en recorrido de 1.600
metros, alzándose con la victoria el titular del Gran Premio San Isidro (G1) de
la temporada pasada, que lució muy superior a los examinadores que le salieron
al paso.
Conducido por Eduardo Ortega, el alazán tostado que entrena Gustavo Romero
sacó a relucir la experiencia que adquirió en competiciones de máxima
jerarquía, y a pesar de que en sus últimas salidas se vio “disminuido”, la
excelente condición que conservaba en los entrenamientos era notoria para su
reivindicación, dejándolo en evidencia sobre la pista de arena capitalina,
superficie que no pisaba en este predio desde que hizo su debut en el 2018.
El descendiente de Heliostatic firmó la sentencia con 4 cuerpos de
diferencia ante Roman the Mad, deteniendo el reloj oficial al cabo de 1’33”33c
para cristalizar el undécimo logro de su historial y el sexto en el ámbito
jerárquico. ¡Y aún le queda por sumar!